Recuerdos en cenizas – COVID 19
Los días para el señor Don miguel Ángel Gonzales (45), quien labora en el Crematorio Piedrangel del Agustino; se han vuelto muy ajetreadas desde que el coronavirus llego al Perú. Él, junto con su personal, tiene una misión muy importante y difícil…. Es el representante de entregar a cada familia una pequeña Urna en donde se encuentra las cenizas de un ser querido”.
“Antes de que la pandemia llegara al país, atendíamos un promedio de 15 a 18 cremaciones diarias, ahora la cifra supera los 50 algunos días, sin exagerar”, advierte Don Miguel.
Debido a este incremento de decesos por COVID-19, dicha funeraria ha tenido que redoblar sus labores. Contratando más personal y disponiendo de hasta tres turnos (las 24 horas) para poder atender la alta demanda que registra actualmente.
La parte más difícil, “es entregar el cuerpo convertido en cenizas a los familiares”. Se hace los trámites correspondientes y le damos un pequeño pésame. Nos retiramos tan pronto como podamos para respetar su espacio de dolor. Llevar los restos de un ser querido, no es un trabajo para cualquiera. Las entregas de Urnas a domicilio se hacen con estricto cuidado. Llevando el protocolo debido: Trajes especiales para el cuerpo, guantes, lentes, mascarillas y desinfectantes (para la Urna). Brindamos un servicio de acuerdo a la economía de las personas. Tenemos la misión de llegar a cada punto de la ciudad. Hay que estar mentalmente preparado